Consejos y pautas para ayudar a encontrarlo
Buscarlo de noche y cuanto antes: De esta manera podréis llamarlo y él os oirá. Vosotros también podéis oír si maúlla cuando le llamáis.
Hablad con todos los vecinos: Es vital para que se corra la voz y estén atentos.
Si tiene chip hay que notificar tu perdida: Para ellos os tenéis que poner en contacto con la RIAC en un plazo de 72 horas.
Llevar su comida favorita: Que sea tipo latita que son más olorosas y poner varios puntos de comida cerca de vuestra casa.
Buscad cerca de casa y dentro: En tu comunidad de vecinos, en los coches aparcados delante de casa, en las calles de alrededor, arbustos, árboles, setos. Revisad a fondo la casa. Muchas veces aparecen en los recovecos menos pensados.
Haz carteles, difunde: Pega carteles por tu barrio, sobre todo cerca de tu casa. Contacta con protectoras y veterinarios de la zona para que sepan cómo es tu gato (por si les entra) y para que te ayuden a difundirlo en sus redes sociales.
No suelen alejarse: Están en un lugar extraño y no se suelen alejar mucho de lo conocido, pero se ponen tan nerviosos que se esconden y no suelen contestar a las llamadas aunque nos conozcan.
Ayúdales con su olor: Hay que colocar cosas suyas cerca de casa para guiarle por el olor. Arena suya, trozos de sus mantitas, ropa vuestra.. podéis dejar su arenero, para orientarle.
De noche cuando hay más calma: Hay que revisar sitios oscuros como los bajos de los coches, alcantarillas con linternas.
Acudir a los centros de recogida de animales: Podéis ir, dejarles un cartel y acudir de vez en cuando para aseguraros que no está allí.
Búscalo cada día y no desistas. Ten paciencia, ya que en muchas ocasiones tardan incluso meses en aparecer.